Las parcelas, enclavadas en el extremo noreste del término municipal, junto a los límites con Tudela de Duero y La Parrilla, en los parajes conocidos como "Juarros" y "El barco del lagar", incluyen dos tipos de terrenos: aquellos sobre los que se efectuaron extracciones de áridos (Arenera de Juarros) hace unos 25 años, ahora con vegetación de almendro, encina y retama; y los contiguos, denominados "Laderas de Juarros" ó "Cuestas de La Parrilla".
En ellas, desde 2007, el Ayuntamiento de Aldeamayor de San Martín ha efectuado las siguientes actuaciones, netamente forestales, sobre 15,30 hectáreas de titularidad municipal:
- Recogida, y gestión posterior, de residuos, escombros y neumáticos.
- Cajeado de caminos (sin aporte de zahorra).
- Desbroce selectivo de la vegetación competidora.
- Podas y clareos en la vegetación adulta.
- Plantación de almendros, encinas y pinos en los lugares despoblados.
- Amojonamiento de las parcelas municipales
- Acondicionamiento de los caminos y vías de acceso
- Instalación de 3 mesas merendero y 1 panel de senderismo
- Señalización del tramo de la ruta de senderismo "Donde los pinos sueñan", que une el espacio de la Arenera de Compasco con la Arenera de Juarros y de ésta tanto con Tudela de Duero como con La Parrilla, al estar muy cercano el trazado de la Ruta "Montevalduero".
Esta zona posee un gran valor ecológico, no en vano más del 50% de la superficie afectada está enclavada en el área catalogada por el Plan General de Ordenación Urbana de Aldeamayor de San Martín (P.G.O.U.) como "Suelo Rústico con Protección Natural" (Cuestas de la Parrilla) y como A.S.V.E. (Área de singular valor ecológico) Nº2 "Cuesta de la Parrilla" en las DOTVAENT (Directrices de ordenación del territorio de Valladolid y entorno), por poseer gran variedad de especies arbóreas, como quejigos, encinas, pinos piñoneros, almendros y chopos (diversidad que contrasta con el resto de vertientes margosas de la mayoría de los páramos de la provincia en las que aparecen, como mucho, pequeños bosquetes de pinos carrascos de repoblación).
Entre las formaciones subesclerófilas destaca por su singularidad uno de los escasos restos de quejigar (Quercus faginea) que subsisten en el entorno de Valladolid, sitos al borde de su distribución climácica, siendo considerados ejemplos relictos de antiguos bosques caducifolios que crecían al abrigo de condiciones más benignas, por lo que se sitúan en las umbrías, formando manchas mezcladas con encinas (Quercus rotundifolia), en las que los quejigos ocupan los tramos más bajos de la cuesta, aprovechando los suelos más desarrollados, frescos y húmedos.
